12 abril, 2012

¿Por qué René no se queda en Cuba?


Hilda Pupo Salazar
Varias agencias occidentales divulgaron que nosotros, quienes habíamos mantenido una intensa campaña por la liberación de los Cinco, ahora la llegada de René a Cuba apenas fue publicitada, no hubo fotos ni comentarios, tal vez acostumbrados a una prensa sensacionalista divorciada de los sentimientos.
Otros, con buena o mala fe, opinaron debía aprovechar y quedarse en Cuba y algunos fueron más lejos en las predicciones y afirmaron que “era poco creíble” que René González regresaría a Estados Unidos.
El porqué se actuó así tiene su explicación, comencemos desde un inicio: “Llegó René a la Patria” fue la noticia publicada el sábado pasado por los Medios cubanos Granma, Juventud Rebelde; la televisión nacional y Cubadebate, y a continuación se reprodujo la nota informativa, divulgada el viernes, y en la cual se informó que el luchador antiterrorista venía a ver a su hermano gravemente enfermo.
Se explicó que la jueza Joan Lenard, quien ha estado a cargo del caso de los Cinco desde un inicio, autorizó el viaje de René por 15 días bajo un grupo de condiciones.
Entre los requisitos para la visita se incluyó: La obtención de todos los permisos necesarios por parte del Gobierno de Estados Unidos, entrega del itinerario detallado de su estancia y localización aquí, comunicación telefónica sistemática con su oficial probatorio, que todas las condiciones de libertad supervisada se mantenían y él debe regresar en cuanto se cumplan dos semanas.
René aprobó los términos establecidos.
Debemos partir de una cuestión clave: René no llegó liberado a la Patria, hecho que hubiera sido meritorio para celebrar por todo lo alto en correspondencia con el reclamo del pueblo y comunidad internacional a lo largo de estos años, sino en una visita privada y familiar por el estado de gravedad de Roberto y esa realidad impone la diferencia. Realmente no se justifica ninguna celebración.
No era prudente amplificar el acontecimiento, hacer actos oficiales o entrevistas, cuando se sabe que la autorización fue concedida con un grupo de condiciones propias a una libertad supervisada no variada en ningún aspecto y si muy criticada por las personas decentes del mundo, porque, al igual que sus otros compañeros, él debía estar en libertad en Cuba.
El está aquí, pero no es libre, y si René regresa al sitio donde continúa su otro tipo de prisión, lo hace como continuación a los principios de honradez, honestidad y confianza mantenidos por él, Ramón, Tony, Gerardo y Fernando en los más de 13 años que llevan prisioneros en cárceles del Imperio y eso prepondera el valor de la palabra dada.
Es una visita humanitaria y de familia a la Patria, pero no puede haber renuncia de valores, ni hacer dejación de la seriedad y responsabilidad que siempre lo ha acompañado.
Recibió la bienvenida con hondo respeto y nos satisfizo que pudiera ver a su “brother”, pero como “no vamos a cejar en la lucha por su regreso definitivo junto a sus cuatros entrañables hermanos” esperaremos a que se abran las rejas del injustificado encierro, se acabe de hacer justicia y toda Cuba se desbordará de alegría.

1 comentario:

Anónimo dijo...

lo poco creible era que no iva a poder viajar a cuba ya que el govierno americano no estaba de acuerdo, pero donde hay democracia el ministerio de justicia no lo manda el govierno como pasa en cuba, la juesa tomo la desicion y el govierno no pudo hacer nada y eso no es todo si tienen que jusgar al presidente lo hacen como si fuera un cuidadano mas